CUBA La población reaccionó sin sorpresa a la decisión del dirigente Fidel Castro renuncia para permitir el relevo en la cúpula de poder Con su decisión el mandatario cierra un ciclo histórico de 50 años al mando de la isla caribeña
Fidel Castro cerró un capítulo en Cuba al anunciar su retirada definitiva del poder, una noticia que provocó más revuelo internacional que en la propia isla, donde los cubanos, acostumbrados desde hace año y medio a su ausencia física, reaccionaron con poca sorpresa ante la decisión del que fuera su líder durante casi medio siglo.
Ultimo líder histórico del comunismo, Fidel, de 81 años de edad, dio el paso al costado tras casi 19 meses de convalecer de una enfermedad intestinal que lo llevó a ceder el mando provisionalmente a su hermano Raúl, ministro de Defensa de 76 años de edad, el 31 de julio de 2006.
"No aspiraré ni aceptaré el cargo de Presidente del Consejo de Estado y Comandante en Jefe", afirmó Castro en una carta publicada en el diario oficial Granma, cinco días antes de que el Parlamento lo postulara para la reelección.
Con la decisión, concluye una era en Cuba, y se abren las puertas para cambios en la cúpula de poder por primera vez en casi medio siglo en la isla.
En su mensaje, Castro no expresó preferencia por ninguna persona que pudiera ocupar su puesto.
Los cubanos reaccionaron con tranquilidad ante la noticia, que no interrumpió su rutina diaria.
"Se esperaba ya, Fidel está enfermo. El pueblo estaba preparado para eso", afirmó Alejandro, un joven de 25 años de edad en la Habana.
"Sorpresa realmente no lo ha sido. Desde el punto de vista sentimental, nos sentimos un poco tristes, pero el destino no se puede cambiar, el país necesita gente nueva", señalaba Marta, una madre de 30 años de edad.
Disidentes.
También la disidencia interna cubana coincidió en que, pese a su renuncia a la presidencia, Castro seguirá más que presente en el acontecer político de la isla.
"Castro, que no ha dicho nada de dejar de seguir siendo primer secretario del Partidose queda arriba todavía. Seguirá siendo la mano que mece la cuna", aseguró la dirigente Martha Beatriz Roque .
En el mismo sentido se expresó Elizardo Sánchez Santa Cruz: "Dudo mucho que se salga del panorama político, le queda la posibilidad de manejar los hilos desde la parte alta del escenario, como Mao en China o Kim en Corea del Norte".
Pese a todo, con la retirada de Castro de la primera línea del poder, se abre un nuevo capítulo en la historia de Cuba. Antes de su enfermedad, más del 70% de los cubanos no habían conocido a otro líder, hasta que el 31 de julio de 2006 Fidel delegara provisionalmente sus poderes en Raúl.
Ultimo líder histórico del comunismo, Fidel, de 81 años de edad, dio el paso al costado tras casi 19 meses de convalecer de una enfermedad intestinal que lo llevó a ceder el mando provisionalmente a su hermano Raúl, ministro de Defensa de 76 años de edad, el 31 de julio de 2006.
"No aspiraré ni aceptaré el cargo de Presidente del Consejo de Estado y Comandante en Jefe", afirmó Castro en una carta publicada en el diario oficial Granma, cinco días antes de que el Parlamento lo postulara para la reelección.
Con la decisión, concluye una era en Cuba, y se abren las puertas para cambios en la cúpula de poder por primera vez en casi medio siglo en la isla.
En su mensaje, Castro no expresó preferencia por ninguna persona que pudiera ocupar su puesto.
Los cubanos reaccionaron con tranquilidad ante la noticia, que no interrumpió su rutina diaria.
"Se esperaba ya, Fidel está enfermo. El pueblo estaba preparado para eso", afirmó Alejandro, un joven de 25 años de edad en la Habana.
"Sorpresa realmente no lo ha sido. Desde el punto de vista sentimental, nos sentimos un poco tristes, pero el destino no se puede cambiar, el país necesita gente nueva", señalaba Marta, una madre de 30 años de edad.
Disidentes.
También la disidencia interna cubana coincidió en que, pese a su renuncia a la presidencia, Castro seguirá más que presente en el acontecer político de la isla.
"Castro, que no ha dicho nada de dejar de seguir siendo primer secretario del Partidose queda arriba todavía. Seguirá siendo la mano que mece la cuna", aseguró la dirigente Martha Beatriz Roque .
En el mismo sentido se expresó Elizardo Sánchez Santa Cruz: "Dudo mucho que se salga del panorama político, le queda la posibilidad de manejar los hilos desde la parte alta del escenario, como Mao en China o Kim en Corea del Norte".
Pese a todo, con la retirada de Castro de la primera línea del poder, se abre un nuevo capítulo en la historia de Cuba. Antes de su enfermedad, más del 70% de los cubanos no habían conocido a otro líder, hasta que el 31 de julio de 2006 Fidel delegara provisionalmente sus poderes en Raúl.
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